Accidentes de tránsito se incrementaron un 72% en tres años

En los últimos tres años, los accidentes de tránsito se dispararon en un 72%, provocando que cada 12 minutos, una persona requiera atención en los hospitales nacionales.

En los servicios de emergencias, los pacientes politraumatizados figuran como uno de los diez diagnósticos más frecuentes cada día.
Sin embargo, la magnitud de los accidentes de tránsito es aún mayor ya que estos inciden en la atención de consulta externa y hospitalización por enfermedad.

Solo en 2017 se atendió a casi 44 mil pacientes con lesiones originadas tras un accidente de tránsito. Cifra que generó una facturación que ascendió a unos ¢30 mil millones, es decir, unos ¢10 mil millones más que en 2015.

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Y es que la atención de estos pacientes no siempre es cubierta en su totalidad por la póliza que ofrece el Seguro Voluntario de Automóviles (SOA).

El año pasado, unos 571 casos requirieron atenciones que superaron los ¢12 millones; es decir, el doble de la cobertura del seguro, por lo que el costo restante debió asumirlo la Caja.

La atención de esos casos representó un costo que sumó los ¢14 mil millones, de los cuales la Caja solo recuperará un 20%; es decir, unos ¢3 mil millones en virtud del techo de la cobertura de la póliza.

Otro aspecto financiero es el pago por concepto de incapacidades originadas por accidentes de tránsito, cuya suma fue de unos ¢4 mil millones en 2017, según la Caja.

Paralelamente a los gastos de atención por accidentes de tránsito, se da un atraso en cuanto a los asegurados que buscan atención por enfermedades.

"Los accidentes de tránsito son verdaderamente preocupantes para la Caja, no solo por la cantidad de casos que recibimos en 2017, sino porque se está dando un aumento de unos ¢10 mil millones en cuanto a la atención. Al mismo tiempo, hay un desplazamiento del servicio de otro tipo de tipologías propias de la enfermedad común, como las cirugías que, en razón de la demanda que estamos teniendo, ocupa que desplacemos nuestros equipos de intervención quirúrgica a la atención de la emergencia del accidente", ejemplificó Wven Porras, de Riesgos Excluidos de la Caja.

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Pero, ¿qué se puede hacer para frenar el incremento de estos casos?

La educación vial y el respeto a la ley de tránsito serían claves.

"En Suecia, desde la infancia, en primaria y secundaria se dan clases de educación vial, permitiendo así un eje transversal en formación del individuo y deberíamos seguir ese ejemplo de formación. Pero también es necesario trabajar con quienes tienen malos hábitos: he sido testigo de niños escolares que cruzan calles en esquinas y en los pasos peatonales, pero sus padres no lo hacen", afirmó Mario Calderón, director de Tránsito.

Por otra parte, cuando se toma un volante hay que tener la concentración total en el manejo: evitar distracciones como ingerir bebidas, alimentos, el uso de aparatos móviles o tabletas. También, tener un vehículo con revisión óptima, respetar la ley de tránsito, no abusar de la velocidad y no consumir alcohol ni drogas, añadió Calderón.

En cuanto al aspecto de cero tolerancia al alcohol en carretera, su consumo duplica la probabilidad de terminar en una sala de emergencias.

"La cantidad de adolescentes y adultos que toman se ha incrementado, además, el 30% de accidentes de tránsito está asociado con el consumo del alcohol”, advirtió Luis Eduardo Sandí, director del Instituto de Alcoholismo y Farmacodependencia.