Cenfotec ofrece charlas gratuitas para evitar el ciberbullying en centros educativos

Como parte de su compromiso con la educación y de su programa de Responsabilidad Social, la Universidad Cenfotec recorre el país brindando charlas a orientadores, padres de familia y estudiantes, sobre los cuidados que deben tener con el uso de las redes sociales y el internet en general para evitar el ciberbullying.

Algunos ejemplos de ciberbullying son: enviar mensajes instantáneos o en un chat para herir a una persona, publicar fotos o videos vergonzosos en las redes sociales y crear rumores en línea.

Los centros educativos interesados pueden escribir a [email protected] para concretar la cita para que los profesores universitarios visiten la escuela y el colegio de forma gratuita.

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“Nos interesa acompañar con educación a todos los estudiantes, desde escolares hasta colegiales que actualmente están inmersos en el campo de la tecnología, con el uso de teléfonos inteligentes, laptops y tabletas, las cuales son las principales herramientas para ser víctimas de una extorsión de cualquier índole. Nos preocupa el aumento de casos que se han conocido de niños y jóvenes víctimas del ciberbullying”, dijo Paula Brenes, directora de Mercadeo de Cenfotec.

Las charlas tienen como base recordar los fundamentos básicos de la seguridad informática, que pueden ayudarle a reforzar la seguridad del entorno digital a nivel personal, protegiendo los equipos y toda la información confidencial que poseen.

“Es importante que los padres de familia controlen el uso de dispositivos, revisar qué están publicando, bloquear a quien los está atacando de inmediato e informar, no borrar los mensajes, porque en los casos persistentes el contenido se debe denunciar al proveedor de telefonía celular, al proveedor de servicios de Internet o a la red social”, explicó Christian Sibaja, profesor de Cenfotec.

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Además, entender que toda la información privada se puede hacer pública: las publicaciones en los muros de los amigos, los mensajes instantáneos privados, las fotos íntimas y las bromas privadas se pueden cortar, pegar y hacer llegar a miles y hasta millones de personas.