Homicidios llegarían a los 800 casos al terminar el año

Si Costa Rica no detiene la lucha entre las bandas narcotraficantes, al término de este 2023 el país alcanzaría una cifra récord de homicidios que oscilaría entre 800 y 900 casos.

Y es que al terminar los primeros tres meses del año, el país contabilizó 200 asesinatos, de acuerdo con las estadísticas del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).

Si el ritmo se mantiene, al culminar diciembre se habrían cometido más de 800 incidentes como mínimo.

“La proyección es que lleguemos a 800 asesinatos como mínimo si no aplicamos medidas urgentes, sin embargo, no podemos descartar que haya hasta 900 casos”, dijo Carlo Díaz, fiscal general, la semana pasada al reunirse con distintos sectores para analizar el tema de la criminalidad.

Al término del 2022, las autoridades ticas contabilizaron 656 homicidios, lo que representó la cifra más alta de toda la historia. Si persiste el ritmo de asesinatos, habría un aumento de un 18% como mínimo.

Mientras el crimen común y el narcotráfico aumentan, la cantidad de policías es incluso menor que hace diez años, según revelan las estadísticas del Ministerio de Seguridad Pública.

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De hecho, el país tiene hoy una tasa récord de homicidios por cada 100 mil habitantes, a la vez que se reporta la cifra más baja de policías para ese mismo número de ciudadanos con apenas 282.

El déficit fiscal y los recortes presupuestarios -principalmente del 2018 a la fecha – explicarían parte del fenómeno, pero también el crecimiento de la guerra entre pandillas por territorio y droga; además de la difícil situación económica que afecta a miles de familias por el desempleo y la exclusión social.

En ese sentido, el presidente Rodrigo Chaves ha señalado que es hora de que los diputados, el Poder Judicial y el gobierno analicen cambios en la ley penal.

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“Sabemos de casos en donde narcotraficantes que han sido sorprendidos en lanchas terminaron libres porque una Corte determinó que eran pobres de origen (…) Aquí hay que ponernos a trabajar el Poder Judicial, el Gobierno y la Asamblea Legislativa para cambiar, lo que algunos llaman alcahuetería extrema en materia penal y hacer las cosas un poquito más firmes”, dijo Chaves. 

Al contabilizar 200 homicidios en los primeros tres meses del año, el presidente anunció que a mediados de abril presentará un paquete de proyectos para frenar el accionar del narco y el crimen común. 

Castigos más severos al decomisar armas ilegales, la revisión de beneficios carcelarios y un tratamiento penal más punitivo en contra de los adolescentes que cometan crímenes graves, serían algunas de las propuestas.

“Tenemos un problema de guerra entre bandas criminales eso es claro. En estos momentos estamos trabajando en varios proyectos que serán presentados a mediados de abril, como por ejemplo, un plan para ver el tema de adolescentes que manejan armas y matan a alguien, eso hay que ponerle límite. Por otra parte, hacemos 2 mil decomisos de armas y solo 17 sentencias. Eso hay que corregirlo. Por último, ¿qué porcentaje de personas cometen ilícitos con beneficios carcelarios? El número es altísimo. El frío no está en las cobijas y nosotros vamos a resolverlo”, dijo Chaves.

Por otra parte, varios medios internacionales dieron a conocer el aumento de homicidios y crímenes en Costa Rica ligados al narcotráfico.

Se trata de publicaciones realizadas en las últimas semanas por la cadena estadounidense CBS y el diario norteamericano New York Post, donde dan a conocer alarmantes cifras de lo que sucede en Costa Rica. 

CBS señaló que el récord de más 650 homicidios que se reportó el año pasado, está relacionado con la creciente violencia del narcotráfico.

Mientras tanto, Costa Rica ha dejado el eslogan del “Pura Vida” a estar “asediada” por los crímenes y las drogas, especialmente en el Caribe, según New York Post.

Ambos medios aseguran que el narcotráfico se ha aprovechado del desempleo que atraviesan los jóvenes del país.

“Costa Rica, laid-back land of ‘pura vida,’ succumbing to drug violence” es el nombre del reportaje publicado anteriormente por The Washington Post sobre este mismo tema.

Estas publicaciones podrían afectar la imagen turística del país, debido a que Estados Unidos es el mayor emisor de turistas de Costa Rica.