Pared de 150 metros en Bajos del Toro es un oasis para cañonistas en Costa Rica

Walter Herrera [email protected] | Viernes 28 junio, 2019

Descender por un cañón con una catarata de 150 metros es lo que podría encontrarse en estas fechas en Río Seco, Bajos del Toro.

Pese a que tiene un nivel de dificultad alto, las condiciones climáticas en esta época lo hacen muy favorable.

catarata

“Este es un río en el que en verano no cae ni una sola gota, pero en invierno sí; es una ruta muy recorrible en un buen día”, señaló Daniele Rocchi, barranquista e integrante de Toros Canyoning, quienes compartieron el relato de esta expedición.

El caudal, que normalmente carece de agua, permite realizar un par de pequeños rappeles antes de la monolítica caída final de casi 150 metros, realizada en tres segmentos.

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Para llegar a esta zona, debe desplazarse en auto alrededor de 11 kilómetros al norte por la Ruta 708 hacia Colonia del Toro, esto desde la plaza de Bajos del Toro.

Justo antes de llegar al puente sobre el río seco, unos metros antes del puente, se puede bajar al cauce del río caminando o por medio de un rappel que ellos construyeron.

CATARATA

De ahí se inicia una caminata de alrededor de un kilómetro hasta una pequeña catarata en dos tramos (R2, de tres y 16 metros cada una). Esta fue armada naturalmente desde un árbol al lado izquierdo del caudal, descendiendo por un chorro de agua.

Desde la base de esta caída son poco menos de 100 metros de caminata hasta el punto crucial de la ruta: una gran catarata de casi 150 m (R3).

“Aunque llevábamos una cuerda de 120 m, tuvimos que armar el descenso en tres largos: un primer rappel desde un anclaje artificial a la izquierda del cauce nos llevó diez metros más abajo a una repisa cuadrada de unos 4x4 metros; ahí armamos otra estación artificial en la pared izquierda y descendimos un segundo largo de unos 40 metros”, explica Toros Canyoning en su nuevo sitio web para quienes deseen replicar la ruta.

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El último anclaje artificial lo instalaron a la altura de una pequeña repisa artificial, de ahí lanzaron el último largo de unos 90 metros.

“Esta última línea nos permitió interceptar la del agua, para un aterrizaje espectacular en una gran poza debajo de la cascada”, señalaron.

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Una vez abajo, son escasos 50 metros de caminata para salir al cañón principal del Río Toro, donde finaliza la ruta.

Ahí deberán seguir contracorriente hasta encontrar el tributario del río Pozo Azul; después, encontrarán una enorme catarata con un sendero turístico en ascenso debidamente señalado que los llevará a la carretera principal.

Ficha técnica

Con esta información cualquier barranquista con experiencia podrá replicar la ruta en el manual.